jueves, 31 de enero de 2019

LA PANDILLA SALVAJE (I)




Técnicamente no es seguro seguir, sin luz. Caras pálidas y tristezas diarias son reales como la esclavitud. Muchos prefieren callar, pocos exploran ideas nuevas, la indiferencia juega de forma desleal.

Si no es bueno para ti, no es bueno para mí. No parece suficiente; no hay nada, nada bueno aquí.

Ahora dices que sientes poco, cada mañana. Si no resulta extraño te verás tropezando y reflejado en supersticiones olvidadas debajo de la cama.  Las veo romperse  y dejándote fuera de lugar.

Si no es bueno para ti, no es bueno para mí. La pandilla salvaje ha llegado por fin.

Recuerdo que de niño, imaginarme en el futuro era un sueño eterno, pues este ya tenía dueño original.

Toda la vida intentando romper esquemas y el mundo diciéndote que te equivocarás, aunque sólo unos cuantos creían en la libertad y en la felicidad; una oferta de vida y una promesa consciente. Si no es bueno para ti, no es bueno para mí. La pandilla salvaje no tiene final.

jueves, 24 de enero de 2019

EL COLOR DE LA VIDA




No es igual hablar de joven que hacerlo siendo viejo; cada vez hay menos gente alrededor. 
No es igual desear una vida llena de aventuras, que vivir sólo y sin ninguna emoción.

¿Quién colorea la vida hoy? Cada día, cada sueño.
El cielo hoy ya no brilla, pues la sirena que nos cautivó, el mar se la llevó.

Llegó el momento más crudo en el que el tiempo carga sus armas contra el futuro.
Mi corazón, palpita cada vez más lento, tal vez sea el último suspiro.

¿Quién colorea la vida hoy? Cada día, cada sueño.
Puedo oír al ejército de ángeles tocar una serenata celestial.

Claro que es una delicia verte aquí de nuevo, te abrazo con la fuerza que eleva el amor.
El cielo resplandece, la sirena que me cautivó hoy me lleva consigo.

jueves, 10 de enero de 2019

AMÉN (Sin razón)


Los amigos que hoy no están expresan en cartas sus muestras de cariño y amor, los ladrones con algo de voluntad demuestran que robar es algo no tan dañino; y cuando las caricias no son suficientes la lluvia se presenta como el testigo de un triste final.

Justo cuando es suficiente, una gota más de agua rebalsa el vaso. Justo cuando es suficiente, más ideas retorcidas acaban con un mar de estrellas plateadas. Y no sé como probar más teorías absurdas.

Aprendía a ser feliz; sin embargo, en el camino empezaba a perder la razón sin ninguna explicación.
Aprendía a comprender a los demás; sin embargo, en el camino empezaba a perder la razón sin padecer ni un segundo.

No siempre una confesión, merece un buen perdón.

Lo siento, borren mi pasado por no entenderlo y las cicatrices que perduren como marcas del destino.
Lo siento, mi cabeza está imaginando cosas raras otra vez y mi mente, convierte en sueños los pensamientos malos.

Por favor aten ya mis sentimientos y secuestren a Dios, pues perdí tantos triunfos y no quiero perder la razón.

Déjenme caminar desnudo en la luna en vez de usar un traje espacial.
Déjenme nadar en la Antártida en vez de cazar elefantes en la sabana.
Déjenme cuidar al amor en vez de declararle la guerra a otros mundos.

No estamos solos, han llegado nuevos aliados y todos son grandes pívots.
No entiendo porque para una mujer valen más unos kilos perdidos que fortuna en quilates de oro.  
No estamos solos, ha empezado la gran rebelión mientras el tiempo se deshace de la compasión.

Tengo un corazón roto; aprendía a ser feliz, pero perdí la razón.